Ayer por la mañana vi en la Plaza Nueva de Granada a Pablo, el guia que conocí en la Alhambra.
Decidimos ir a tomar un colacao juntos y mientras estábamos hablando vino el chico que distribuye el “20 Minutos” , mi atención se paró de repente sobre un artículo de primera página que hablaba de la fiesta de la primavera y del mega botellón que se había organizado.
Después de haber leido el artículo, Pablo me contó su opinión sobre el tema, me dijo que a él le gusta el botellón, que lo ve un óptimo instrumento de reunión donde los jóvenes se divierten y pueden conocer facilmente a mucha gente.Obviamente mi opinión era completamente diferente a la suya, así le dije que para mi el botellón es sólo una mala costumbre y que sería mucho mejor perderla. Dije también que este ritual lo llevan a cabo los jóvenes muchos días a la semana.
Le conté que yo como todas mis amigas, veíamos el botellón como el entretenimiento de moda y que por esto ibamos allí para encontrar a los chicos más guapos. Como cuando teníamos catorce años y la mayoria de las veces bebiamos un montón, no porque nos gustara sino para demostrar que éramos chicas que no temíamos nada.Terminé preguntandole cuántas personas conocía que no bebiesen. Él obviamente, después de pensarselo un poco, me contestó que ninguna.
Pero me dijo que cree que no es el botellón el problema y que muchos amigos suyos no se van al botellón, sino que se quedan en casa pero también beben como locos.La única diferencia es que en casa no hay la posibilidad de conocer otra gente.
Me paré a pensarlo un poquito pero todavía no he logrado entender qué es lo bueno de estos botellones tan de moda entre los jóvenes actualmente.

Para todos mis amigos que leen este blog!¿Os acordáis de esta foto?
La encontré ayer en una vieja caja que tenía en casa de mis padres....¡¡¡cuantos recuerdos!!!Me parece como si fuera de otra vida, como si no hubiesen pasado sólo diez años de aquella época sino cien.Éramos muy distintos y nos pasábamos las horas tirados en el suelo de mi habitación escuchando música reggae y a haciendo el tonto con mi cámara digital.
Me acuerdo que, como en esta foto, yo llevaba el pelo largo pero siempre atado y de un color raro debido a los diferentes tintes que me dejaba poner por mis compañeras de piso para no pagar el peluquero, pero que siempre salían muy mal.Nosotros lo hacíamos todo, sin comprar nada porque era como si de esta manera nos sintiéramos artistas y sobre todos especiales, diferentes, únicos.Como la camisa que llevaba en la foto, que en principio era azul pero después de un lavado hecho mal y de algunos dias en lejía se transformó.
Le corté el cuello y la llené de imperdibles que le daban una forma rara y así me la ponía siempre, como símbolo de mi arte.Como yo, todos mis amigos tenían sus señales de distinción, Agus siempre con su gorro, Angy con sus faldas de estilo hippie super coloridas, Coty con los piercings y los tatoos a la vista y siempre vestido de negro, el Perdi con su camisetas estranjeras y por fin Rosa siempre con sus bufandas.Esta foto me encanta y cuanto más la miro, más nostalgia me entra de aquel tiempo en lo que nos divertiamos mucho y nos lo pasabamos bien únicamente estando juntos.

Conversación entre Pablo y Arancha.

Ayer por la tarde, mientras estaba paseando por la Plaza Nueva, encontré a Arancha y dado que ambos teníamos tiempo libre fuimos a tomar un colacao a un café. Me dijo que el servicio fotográfico de Manuel por su revista había ido muy bien y eso me puso contento. Me contó también de un artículo que había leído el día antes, en el que se hablaba del fenómeno del botellón, muy frecuente hoy día en España, sobre todo en las ciudades llenas de jóvenes, como es Granada. Hablamos mucho de este tema y Arancha me dijo que la del botellón es una mala costumbre porque incita los chicos a beber. Afirmó que es un mal ejemplo porque así los jóvenes empiezan a beber demasiado pronto. Yo le contesté que no estaba del todo de acuerdo con ella porque creo que cada tanto participar al botellón puede ser interesante ya que se conoce a un montón de gente, aunque pienso que seguir bebiendo por muchas horas me aburriría, si bien me encanta beber. Arancha me informó también de que le agrada la iniciativa del Ayuntamiento granadino de organizar alternativas al botellón como por ejemplo visitas guiadas a la Alhambra; pero los jóvenes maniáticos del beber siguen yendo todos los fines de semana a emborracharse juntos porque ya es una característica de la propia cultura, la cual quizás para los otros es un exceso, pero para los españoles es algo tradicional. Después de esta interesante conversación nos despedimos, pero antes nos dimos reciprocamente nuestros números de móvil para entablar una nueva amistad.

Si eres un empleado dependiente, aquí está un decálogo para tener éxito en el trabajo.

1. Sé siempre puntual, si no tu retraso será una buena razón para que el jefe te despida.
2. Hay que mostrar ganas de trabajar y tus mejores cualidades al jefe, así quizás él te dará una promoción.
3. Quéjate sólo si es necesario y no por ejemplo porque el café de la oficina no te gusta.
4. Tienes que no hablar mal del jefe con tus colegas porque uno de ellos podría contarselo al jefe.
5. Estás obligado a respetar tu jefe aunque sea antipático porque es él que te da el sueldo cada fin de mes.
6. No te identifiques nunca con una ideología política o creencia religiosa en presencia de tu jefe: si él no está de acuerdo contigo es probable que desde aquel momento te considere antipático.
7. Es importante actualizarse en relación con el asunto del propio trabajo.
8. Si no aguantas a tus colegas empieza a no ocuparte de ellos, sino preocúpate sólo de trabajar bien.
9. Es necesario mejorar las propias capacidades laborables intentando aprender de los otros lo más posible, como si fueras una esponja.
10. ¡En todo caso sé muy muy paciente!

Saludos de José

Hola chicas, ya estoy en vuestro blog y ya estáis en el índice del mío.
Hasta pronto
José Rovira

Cómo nos gustaría estar allí... En cambio tenemos que estudiar... :-P

Besos a todos!!!

Anita & Gise

(no funciona el "!" al revés)

El día más importante de mi vida.

Esta mañana he leido un artículo sobre el periodico que ahablaba del día más importante de la vida de la cantante que hace poco conocí en la Alhambra.De repente mi mente se ha puesto a buscar meticulosamente en mis recuerdos para declarar cual, entre los tantos, ha sido mí día más importante.La busqueda no ha sido tanto facil, el día más importante no tiene que ser necesariamente un día feliz.
De todas maneras, despés de casi dos horas he llegado a la conclusión que el día más importante de mi vida ha sido el día en el que me fue a vivir sola.Tenía sólo diecinueve años y empezaba un nuevo capítulo de mi vida porque había terminado el colegio y finalmente habría podido estudiar lo que realmente me gusta .
La Academia de foto en la que iba a estudiar está en Barcelona así tuve que buscarme un piso y mudarme allí.
Era un piso compartido y en realidad era feísimo pero todavía me acuerdo d la emoción que probé el primer día, cuando llegada delante del portal, introducí las llaves en la cerradra y entré en la que habría sido mi nueva casa.
Conocía ya a dos de lo chicos que habrían dividido el piso conmigo y me acuero que los encontré ya en casa el primer día que me esperaban.
Con un sorteo decidimos las habitaciones de cada uno y yo me precipité enseguida en la mía.Cerré la puerta detrás de mí y me lancé en la cama,empezé a reír como una loca y pensaba sólo que aquel era mi mundo .Un mundo mío en lo que podia hacer todo lo que quería sin pedir el permiso a nadie.Habría podido ser la más desordenada del mundo y dejar mi ropa en el suelo habría podido dormir de día y hacer fiesta de noche, habría podido bailar sobre mi camao también escuchar música a volumen muy alto.Sentía una emoción fortísima, una mescla entre gana de hacer nuevas cosas y miedo de estas pero, de seguro ha sido un día que nunca olvidaré.

Descripción de una fotografía.

Esa es una foto que me hice el año pasado, cuando yo y algunos amigos míos nos fuimos de vacaciones a Londres. Como puedes ver, aquí llevo un abrigo negro y un gorro gris muy bien puesto en la cabeza porque hacía un frío terrible al que yo no estoy acostumbrado. Sin embargo me lo pasé genial con mis amigos porque ví un montón de monumentos característicos de esa ciudad que amo. Uno de ellos es exactamente el puente que ves detrás de mí en la foto: el famoso “Tower Bridge”. Me acuerdo perfectamente cuando pasamos por allí: el viento casi nos cortaba la cara, aunque en realidad yo no lo sentía mucho porque estaba demasiado feliz de ver con mis ojos la ciudad de mi sueños. En esta foto no se ve, pero durante esos días Londres estaba aún más llena de gente que como lo es normalmente porque era la semana del día de Navidad. De hecho, en algunas zonas como la famosísima “Camden Town” o “Soho”, casi no se podía pasear a causa de los miles de turistas, los cuales venían de toda parte del mundo. Desde luego, también los medios de transporte público estaban llenos, pero la cosa más rara fue que conocimos a muchos españoles que oímos hablar en el autobús, en el metro o en las varias tiendas. Nos acercábamos a ellos para preguntarles algunas informaciones y fueron muy gentiles con nosotros: nos dimos reciprocamente consejos sobre los lugares más bellos de la ciudad. Esta es sólo una de las muchas fotografís que me hice, de hecho siempre llevaba en la mano derecha mi cámara para capturar cada momento particular con mis amigos o cualquier cosa que me impresionaba, porque me encanta ver las fotos cuando ya ha pasado mucho tiempo del momento en que las hice, para recordarme de aquellos instantes de felicidad y sonreír, exactamente como hago cada vez que veo las fotos de ese viaje magnífico a Londres.

El día más importante de mi vida.

Ahora os hablo de un día que ha sido muy especial para mí porque ha señalado un momento de transición en mi vida: el día en el que me licencié. Sucedió el año pasado, es decir cuando tenía 24 años, en la Universidad de Salamanca y ya os he dicho que tengo la licenciadura en “Lenguas y Culturas extranjeras”. Aquel día lo recuerdo perfectamente porque había estudiado muchísimo durante los 5 años anteriores y no veía la hora de licenciarme para finalmente entrar en el difícil mundo del trabajo. La noche anterior no había dormido muy bien porque estaba preocuoado de hacer un papelón con los profesores y estuvo repitiendo mil veces mi tesis de licenciadura. De todas maneras aquella mañana vino y me fui a la universidad con mi familia y mis amigos (que vinieron desde Malaga). Cuando llegué allí encontré mis colegas ¡pero faltaba un profesor! Siguieron momentos de tensión pero al final el docente que estaba en retraso llegó. Era un día de junio y hacía mucho calor en el aula, también porque había un montón de gente y yo estaba cada vez más nervioso, hasta cuando me tocó a mí hablar. A pesar de mi preocupación, todo fue bien y aquel día era la persona más feliz en el mundo porque había hecho muchos sacrificios para obtener la licenciadura, pero sobre todo porque ahora podría trabajar y entonces podría ser independiente de mi familia. Por la noche mi madre me hizo mil fotografías y después mi familia, mis amigos y yo fuimos todos a celebrarme a mi casa donde comimos y bebimos hasta la madrugada. Aunque sabía que encontrar trabajo no sería fácil, tampoco con una licenciadura en el bolsillo, aquel día pensaba que con sacrificios y vountad se puede obtener todo; de hecho he encontrado trabajo después de algunos meses y hoy soy orgulloso de mi mismo porque tengo un sueldo mío. En conclusión, puedo decir que aquel día ha sido muy importante para mí también porque ha significado un gran crecimiento y un cambio positivo en mi vida: la independencia.

Adoro mi trabajo.

Cuano era studiante en la Academia de Barcelona vivía con un chico alemán , Daniel, y todos los años iba con él y algunos amigos a la fiesta medieval de su pueblo .Nunca la olvidaré, era como vivir un día en un cuento.Toda la ciudad se transformaba en un campamento, la gente vestía con trajes típicos y nosotros mirabámos todos los caballeros en sus armaduras chocar contra los enemigos y las preciosas damas que esperaba al caballero más valiente y victorioso para besarlo al final.Estaban también los juglares y los músicos que entonaban baladas.Nosotros íbamos de un campamento al otro comiendo comidas cocinadas en las largas hogueras, danzábamos y bebíamos cervezas y pociones de las brujas que habían magicamente hecho enamorar a los caballeros más valientes.Había una atmosfera tan encantada y particular que no queríamos nunca acabar.
Pero, todo como por encanto desaparecía al alba del día despues.Por suerte la semana que viene volveré a vivir toda la magía sólo gracias a mi trabajo.

Nuevos encuentros...

Esta semana la revista me ha encargado de hacer un servicio fotográfico de la Alhambra, así he tenido que volver otra vez en Granada, una de las ciudades de España que más me gusta.
Me he levantado muy temprano porque lo que quería inmortalizar era el frenesí y la laboriosidad que se esconde tras la inmagen estática e imponente de este palacio real.
Mientras iba por el Palacio Nazarí me he prado un segundo delante del Parador y he visto un jóven jardinero que regaba unos meravillosos ciclaminos de un color rojo intenso, entonando una vieja sevillana.
He ententado inmediatamente imprimir esta imagen en mi cámara pero el jardinero se ha dado cuenta de lo que quería hacer y puede ser que por un poquito de narcisismo, se ha puesto de repente en una pose plástica haciendo todo demasiado artificial.
En ese mismo instante los dos hemos escuchado un montón de gente gritar el nombre de Iris Santos y hemos realizado que detrás de nuesta imagen tranquila estaba la jóven cantante tomando el sol y mirándonos. Un guía medio histérico entendeba inutilmente reconducir al orden los turistas.
Al comienzo no me he acercado pero luego la curiosidad ha tomado la ventaja también sobre de mí.
He tenido la ocasión de conocer a la cantante, me ha parecido una persona simple y no arrogante y altanera como dicen los periódicos, también la guía, Pablo que al comienzo me hizo una mala impresión se ha demostrado un chico muy simpático.
Por fin he logrado ponerme de acuerdo con Manuel, el jardinero, para sacar fotos de veras inéditas del Alhambra pero mientras nosotros hablamos llegaron cada vez más turistas y antes de que aquel coas me invadiera totalmente haciéndome perder todo el encanto de aquel lugar, he decidido seguir por mi camino.

CUANDO ERA PEQUEÑO...

Cuando era pequeño vivía muy serenamente en Malaga porque gracias a mis padres nunca he carecido de algo, tanto cosas materiales como afecto; y cuando mis padres no estaban en casa por culpa del trabajo, yo me quedaba con mi abuelo paternal Mario, al cual quería mucho. De hecho, cuando yo tenía catorce años y él murió, fue un duro golpe para mí porque sucedió de repente, pero ahora cada vez que pienso en él lo hago con una sonrisa porque me acuerdo de lo que hacíamos juntos. El mar es mi pasión y tengo que decir gracias a mi abuelo por eso porque muy a menudo me llevaba a la playa: le encantaba escuchar el ruido que hacen las olas cuando golpean en la orilla. Además, solíamos recoger las conchas con formas y colores especiales que encontrábamos en la arena y cuando yo volvía a mi casa las ponía todas en una caja que todavía tengo en mi habitación en Malaga. Mi abuelo me enseñó también a hacer colgantes y pulseras con las conchas recogidas, que yo regalaba a mi madre y a las niñas de mi escuela; en realidad eso me ayudaba a mejor relacionarme con los otros porque siempre he sido una persona muy introvertida también porque estaba un poco gordo y los niños me tomaban el pelo, aunque creciendo he aprendido a no ser demasiado tímido y a dejarme conocer por mi personalidad, prescindiendo de las apariencias. De todas maneras, mi abuelo Mario me ha enseñado mucho y otra pasión que me transmitió es la de montar en bicicleta, de hecho cuando hacía buen tiempo y no hacía demasiado frío, siempre íbamos por la ciudad, pasando por las plazas más bellas. Me divirtía mucho cuando estaba con él y nunca olvidaré esos momentos especiales de mi infancia pasados en compañía de mi querido abuelo Mario.

EL PRIMER ENCUENTRO...

Hoy ha ocurrido algo muy especial: ¡he conocido a la famosa cantante Iris Santos Gómez! Estaba visitando la Alhambra con mis turistas italianos tranquilamente y todos me escuchaban con mucho interés, cuando de repente todos se han vuelto hacia el hotel “Parador” porque se habían dado cuenta de que allí estaba Iris, la cual ya estaba rodeada de mil personas. Llevaba un traje azul claro que le evidenciaba todas sus sensuales formas. Total que los turistas me han abandonado para pedirle a la hermosa cantante un autógrafo y esa ha sido muy gentil con ellos. Luego, ya que todos hacían un gran ruido en torno a ella, yo también me he acercado a la muchedumbre que estaba allí en aquel momento y nos hemos conocido. Cuando esta mañana me ha estrechado la mano ha sido muy emocionante para mí porque nunca habría imaginado que pudiera ocurrir eso. He conocido también al jardinero de la Alhambra, Manuel, un chico muy simpático, y a Arancha, una fotógrafa de Girona que estaba haciéndole fotos a él para la revista “Viajar”. Ellos también son aficionados de Iris por eso se han acercado a ella en el mismo instante que yo y así hoy nos hemos conocido. Estoy muy contento porque ha sido una experiencia increíble que nunca olvidaré, además he conocido a tres personas muy simpáticas y creo que nos volveremos a ver porque Iris estará en Granada una semana y me ha dicho que quería un guía para visitar esta ciudad que le encanta, mientras que Arancha volverá a la Alhambra para hacer fotos a Manuel y yo también tengo que volver allí con mis turistas.

MI OTRO YO

¡Hola a todos! Soy Pablo García Romano y quería hablar de mí para que me conozcáis un poquito. Soy un jóven de Malaga, tengo 25 años y trabajo en Madrid como guía turístico. Me agrada mucho mi trabajo porque me permite estar en contacto con mucha gente de diferentes nacionalidades y así puedo hablar las lenguas extranjeras que me gustan. De hecho me he licenciado en “Lenguas y Culturas extranjeras” en la Universidad de Salamanca, exactamente en italiano e inglés; eligí estos idiomas porque mi madre es italiana (del sur de Italia), entonces ya conocía un poco de italiano, mientras que el inglés es mi lengua preferida, ¡la más hablada en el mundo! Ahora me describo para que os hagáis una idea sobre mi aparencia: tengo los ojos y el pelo morenos, la piel oscura, peso 75 kilos y mido 1,75 metros, por eso la gente me considera bastante guapo; generalmente llevo vaqueros y zapatillas de deporte, con camisas o jerseys. Creo ser un chico simpático, inteligente, muy paciente aunque soy un poco tímido con las personas que no conozco, mientras que con mis amigos bromeo muchísimo y logro ser muy extrovertido. Soy un deportivo poe eso voy al gimnasio y cuando puedo monto en bicicleta. Escucho música rock y mi grupo preferido es Placebo; no me gusta mucho ir a la discoteca, ni ver la televisión, ya que no soporto la música dance y pienso que hay poquísimos programas televisivos inteligentes. En cambio, me gusta salir con mis colegas, sobre todo para ir a comer en restaurantes extranjeros, dado que me encantan todos los tipos de comida. Cuando estoy de vacaciones siempre vuelvo a Malaga para estar con mi familia y mi viejos amigos que conozco desde cuando era pequeño. Cuando voy allí, paso muchísimo tiempo en la playa, porque el mar es mi pasión. ¡Ah! Olvidaba de deciros que soy alérgico a los geranios y me dan miedo las arañas, por eso si un día nos vemos , no me hagáis bromas... Creo que es todo. ¡Espero que os guste!